
La igualdad como tal es casi imposible de lograr, ya que todos los seres humanos tienen metas e incentivos diferentes. Sin embargo la igualdad de oportunidades es algo muy noble por lo que luchar.
El otro día mi hermano me dijo: Me gustaría ser bueno jugando al fútbol.
Yo respondí que la cancha de fútbol es como un gran tablero de ajedrez y que las diferentes piezas tienen diferentes habilidades. Lo que quise decir es que tal vez uno no es habilidoso y veloz como un alfil, pero sí robusto y duro como una torre. Creo que uno acorde a sus cualidades puede “especializarse” en algo particular y llegar a ser muy bueno en eso.
La industria de hoy demanda talento y los ciudadanos de internet contamos con el superpoder de la información a nuestro alcance. Si realmente lo queremos podemos hacer un curso de cinco horas sobre lo que sea y comenzar a convertirnos “especialistas en algo”.
Es un simple paso, pero tal vez muy difícil. Encontrar “la chispa”. Lograr ver esa versión de nosotros como los profesionales o especialistas que deseamos ser algún día, con estabilidad económica, independencia y libertad.
Una vez que vimos lo que queremos y nos invertimos en ello, cada pequeña cosa que hagamos cada día nos acercará un poco más a esa versión de nosotros que queremos ser.